En mis talleres de Gestión del Tiempo frecuentemente encuentro personas cuyo principal problema es embarcarse en infinidad de tareas que no les acercan a sus objetivos. Es decir, tareas que les mantienen ocupados día tras día, les hacen centrarse en el corto plazo y como consecuencia pierden perspectiva y, lo que es aún peor, agotan su tiempo y energía.
Muy a menudo suelen ser tareas en las que se embarcan por no saber decir «no» a tiempo. Como bien decía Steve Jobs.
“Sólo aprendiendo a decir “no” podemos concentrarnos en las cosas que realmente importan”. Steve Jobs
Cuando plantean el problema, me comentan que les cuesta mucho negarse a hacer lo que otros les pide por temor a dañar una relación personal. Pero ¿Cómo evitarlo?
En realidad, eres dueño de tu negativa, es algo que tu no quieres hacer por cualquier motivo. Explica tus motivos reales sin buscar excusas ni mentir. Muestra empatía con la otra persona, estás rechazando su petición pero no a él o ella.
Vamos a ver las claves para hacerlo correctamente sin necesidad de quedar mal con nadie.
Clave 1. Evita dar una negativa seca, procura decir algo más. Un “no” rotundo y solitario puede generar malestar, distancia, resentimiento….
Clave 2. Diferencia entre la persona y la petición. El que rechaces una petición puntual no significa que rechaces a quien te lo solicita. Déjaselo claro.
Clave 3. Da alternativas: el decir “no, pero te propongo…” y ofrecer otras posibilidades suaviza la negativa y hace que el receptor se sienta comprendido. Hay veces que dando estas alternativas solucionamos sus problemas mucho mejor incluso que si lo hiciésemos nosotros mismos en ese momento (simplemente porque quizá lo hagamos con prisa o estresados). Algunos ejemplos de estas alternativas podrían ser:»Hoy no puedo, pero si te pasas mañana a primera hora lo hacemos»,»Yo no puedo pero conozco a alguien que te podría solucionar el problema»,»No tengo esa información, pero si vas a esta web te informarán de todo», etc…
Clave 4. Empatiza dando una explicación que te acerque al otro “Agradezco que hayas pensado en mi, el proyecto me parece muy interesante, sin embargo, me gusta dedicar las tardes a mi familia porque….”
Clave 5. Presta atención al tono. Evita utilizar un tono hostil o duro. Se amable y da la negativa en tono firme pero relajado.
Clave 6. Equilibrio. La clave para unas relaciones en armonía (con nosotros mismos y con los demás) es el equilibrio.
«Decir «no» no es malo, no decirlo nunca sí «
En resumen, reflexiona sobre el modo de decir «no» que mejor se adapte a ti y recuerda que lo más importante es:
1. Empatizar: entender la petición, conocer su objetivo, su necesidad.
2. Decir claro mi objetivo: evitar excusas y justificaciones.
3. Ofrecer alternativas.
¡Espero que te sirva de ayuda!
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Inma Ríos Experta en Liderazgo y Desarrollo de Equipos de Alto Rendimiento, se dedica a guiar a Líderes y Equipos a alcanzar sus objetivos , por medio de Formación, Mentoring y Desarrollo Personal. Ingeniero Agrónomo con 15 años de experiencia en multinacionales en varios países. Business Trainer, Conferenciante y Coach Profesional Certificada por ASESCO nº 10.370. Más información en www.inmarios.com
