Hace unas semanas vi un post de un empleado de Telefónica que compartía con la red con orgullo el reconocimiento que había recibido por parte de su empresa. Esto me hizo rememorar aquel día en Dublín cuando me entregaron algo tan simple como unas cuantas palabras plasmadas en una sencilla hoja de papel (véase foto portada de este post). Era el reconocimiento por mi trabajo en un proyecto de reducción de costes que tuvo una gran repercusión en la empresa a nivel internacional. Todavía recuerdo como aquel gesto me hizo sentir, ¡y eso que han pasado más de 15 años!.
«En sus 25 años a la cabeza de General Electric, Jack Welch siempre tuvo algo claro: sabía lo importante que era reconocer el trabajo de sus empleados. Welch estaba seguro que si premiaba a los buenos colaboradores, obtendría la motivación necesaria para alcanzar las metas de la compañía.»
Cuando hablo con trabajadores en diferentes empresas se repite una y otra vez cómo echan de menos el reconocimiento de su trabajo. Esto es algo que tienen en común la gran parte de las empresas. Es por ello que insisto tanto en las empresas con las que colaboro que es fundamental cuidar ese reconocimiento hacia sus colaboradores. Realmente se subestima la importancia y el poder motivador del reconocimiento, y además es algo que realmente no tiene por qué conllevar un coste económico.
“El gran problema es que la mayoría de las empresas tiende a confundir lo que es el reconocimiento con la compensación económica.”
¿Qué beneficios genera un reconocimiento bien hecho?
Reconocer a los trabajadores por un trabajo bien hecho reporta entre otros los siguientes ocho beneficios:
- Refuerza comportamientos positivos y deseables en la empresa.
- Aumenta la involucración y compromiso con la organización.
- Mejora la satisfacción y la felicidad de los trabajadores.
- Mejora la autoestima y la autoconfianza del equipo.
- Proporciona un feedback positivo, que reafirma que se está trabajando bien.
- Mejora la habilidad para gestionar el estrés y las situaciones profesionalmente complicadas.
- Aumenta la motivación, siendo el reconocimiento uno de los gestos con más poder motivador y más demandado dentro de las organizaciones.
- Todos estos efectos tienen un importante efecto en la productividad del trabajador y por tanto en el rendimiento para la empresa.
Jack Welch, ex presidente y CEO de General Electric por casi 20 años, tenía una práctica poco habitual: acostumbraba enviar notas de felicitación de su puño y letra, a los empleados más destacados de su empresa. Las cartas eran sumamente valoradas por sus colaboradores. No por nada, eran escritas por el propio líder de la organización, y reconocían, personalizadamente, la labor efectuada.
- Reconocimientos verbales y gestos
Siempre que sean auténticos y sinceros, los reconocimientos públicos en forma de comentarios y hasta la típica «palmada en la espalda» tienen la fuerza suficiente para que el empleado sienta que su trabajo se aprecia y tiene valor. - Por correo electrónico
Hay veces que un simple correo electrónico puede ser un método adecuado para ofrecer ese reconocimiento. Si en ese correo ponemos en copia a alguien relevante como algún superior, resto del equipo, etc,…todavía mejor. Estos correos suelen ser muy bien recibidos por los empleados, puesto que se transforman en visibles para los demás. - Un documento escrito
A veces un sencillo documento escrito, como los de las imágenes empleadas en este post, tienen un gran efecto. Además si el empleado lo conserva o lo pone en un lugar visible se alarga el efecto motivador. Tal y como se menciona en este post, hasta el mismísimo Jack Welch, en General Electric, utilizaba este método y era muy valorado entre sus colaboradores. - Evaluación de Desempeño
La reunión anual con cada miembro de nuestro equipo es una excelente oportunidad para ofrecer reconocimiento al trabajo bien hecho, apróvechemos esta ocasión. Además servirá dejar de percibir esta práctica como algo negativo o un exámen para el empleado. - Premios
Si la empresa dispone de medios económicos holgados a veces se puede permitir otro tipo de recompensa: una cena, un bono-regalo, un viaje…etc. Pero quiero hacer especial énfasis de que el reconocimiento no tiene por qué llevar consigo un coste económico. - Promoción
En aquellas empresas de tamaño suficiente y cuando el reconocimiento no es solamente por algo puntual, sino por toda una trayectoria profesional de buen trabajo, la promoción en la empresa es la forma de premiar ese esfuerzo y es como ese colaborador se sentirá verdaderamente reconocido. - La recompensa económica
Premiar los esfuerzos de los trabajadores con un aumento de sueldo o en forma de bonos u otros incentivos monetarios es la forma de reconocimiento que más rápidamente nos viene a la cabeza. Sin embargo, utilizarlo como único método, acaba perdiendo eficacia y puede volverse incluso contraproducente.
Algunos consejos finales
- El reconocimiento se debe hacer en el momento oportuno: No hace falta esperar a hacer una evaluación de desempeño para poder mostrar lo que se ha hecho bien. El reconocimiento tiene impacto cuando lo hacemos de manera inmediata, posterior a que se ha desarrollado el hecho a reconocer.
- Realizar acciones de reconocimiento, sólo si realmente se siente: Los trabajadores presienten cuando los elogios son reales o sólo por compromiso.
- La sonrisa es importante: Si se felicita a un trabajador, él debe sentir que le transmiten alegría y orgullo por algo que hizo bien.
Y después de leer todo esto, ¿Cómo y cuándo vas a empezar a aplicarlo?
